Un estudio de The Journal of Sex Research, reveló que las mujeres son más propensas a cometer una infidelidad que los hombres.
También agrega que ellas quieren más sexo que ellos, pero esta nueva investigación realizada por un grupo de psicólogos estadounidenses indaga sobre la variación y consecuencias de estos comportamientos extra-matrimoniales.
Esta medición se llevó a cabo fijándose en usuarios de Ashely Madison, la famosa web para infieles.
Encontrando que el 2020 el 9% de los adultos considera una aventura «moralmente aceptable». Un dato que en 2006 era del solo 4%.
En este aumento tiene mucho que ver la progresiva aceptación en nuestra sociedad de las parejas abiertas, los intercambios o cualquier dinámica swinger.
Este estudio resalta que se ha aumentado mucho la frecuencia de “infidelidades tecnológicas”.
lo anterior, entrando en algo que se llama “las charlas picantes online o las videollamadas sexuales ya son la infidelidad más frecuente”.
Esto seguido de los intercambios sexuales físicos y, por último, de verdaderas relaciones afectivas y amorosas en una infidelidad.
Experta
Lara Ferreiro, psicóloga experta y portavoz de la plataforma de citas dijo que, “curiosamente, las mujeres en el estudio actual informaron participar en infidelidades en mayor medida que los hombres”.
Les resulta más atractivo usar plataformas como Ashley Madison que protejan su anonimato, explica la profesional.
Los datos
En cuanto a las parejas que consienten o no la infidelidad, también se destaca que el 28,9% de usuarios indican que su relación mejoró, mucho o algo, en comparación con un 14,1% que, afirman, empeoró.
Estos datos provienen de un portal que promueve la infidelidad como negocio, por lo que hay que cogerlos con pizas (y protección, póntelo, pónselo).
Aunque se resalta que el comportamiento sexual de los hombres sigue siendo juzgado con mucha más severidad que el de las mujeres, está dinámica cada vez está más igualada, por lo que se tiende a un solo estándar sexual.
Causas de las infidelidades
Son muchas las razones que pueden hacer que una persona sea infiel con su pareja.
La monotonía, la falta de deseo sexual o la necesidad de sentirse deseado son algunas de las causas más comunes; ello no significa sin embargo que sean las únicas, por lo que intentar hacer un listado cerrado sería inútil.
En cualquier caso, los motivos que llevan a la infidelidad son iguales en hombres y en mujeres; esto puede chocar con algunas ideas preconcebidas, aunque se ha demostrado ampliamente en múltiples investigaciones.
Las razones más comunes
Nunca se ha tenido la intención de ser fiel: Algunas personas simplemente no creen en la monogamia.
El hecho de que tengan pareja no implica que pretendan dejar de tener relaciones con otras personas.
- Insatisfacción con la pareja: Esta insatisfacción puede ser sentimental, sexual, de atención o de cualquier otro tipo.
Ante esta sensación de no ser cuidado por la pareja, muchas veces se buscan relaciones con terceras personas.
- Creer que ya no hay amor: Muchas veces, como consecuencia de la disminución del deseo y de la actividad sexual.
Este proceso es natural en todas las parejas, pero a veces lleva a interpretar que la relación se ha roto.
- Buscar una alternativa a la actual pareja: Ya se sabe que se quiere abandonar a la actual pareja, pero se busca tener a alguien en la recámara.
No se quiere romper la actual relación sin tener la otra aún asegurada.
- Sensación de inseguridad personal: Se puede dar si la persona se siente más fea que su pareja, menos atractiva, menos inteligente, etc.
La infidelidad sirve como forma de reafirmación personal, al sentirse que se está “en el mercado”.
- Monotonía en la relación: Esto puede suceder incluso si la relación es valorada positivamente en su conjunto.
¿Cuáles son las principales señales de alarma de que puede existir infidelidad?
Detectar una infidelidad puede ser difícil, aunque existen indicios que pueden dar lugar a sospechas.
Al fin y al cabo, mantener una relación paralela en secreto es también complejo, por lo que es improbable que se pueda ocultar por completo que se está manteniendo un idilio con una tercera persona.
Por ello, aunque se oculten las pruebas más evidentes, siempre quedan pequeñas señales que pueden ser significativas.
Algunas de estas pistas son cambios sutiles en actitudes o comportamientos cotidianos de la pareja como, por ejemplo:
- Cambios en las rutinas diarias.
- Estado de ánimo alterado, propensión a iniciar discusiones.
- Aislamiento emocional y falta de comunicación.
- Interés por cuestiones que antes no llamaban su atención, o gustos diferentes (por ejemplo, en música, opiniones políticas, literatura, etc).
- Falta de transparencia, no permitir acceder al teléfono o al ordenador propios.
- Mantener un exceso de privacidad, por ejemplo, saliendo de la habitación para hablar por teléfono.
- Reacción negativa de la pareja cuando se la visita de manera imprevista.
- Hablar frecuentemente de una misma persona, incluso si es de manera negativa.
- Gastos fuera de lo normal en tarjetas de crédito, por ejemplo, en restaurantes, hoteles o joyería.
- Creación de cuentas de correo o líneas de teléfono adicionales, o cambio de contraseñas de las que ya tiene.
- Cambio de actitud de los amigos de tu pareja hacia ti.
- Tu pareja comienza a hacerte regalos sin motivo aparente.