Las historias sobre ufología y vida extraterrestres no son pocas, muchos hechos han ocurrido através de los años que nos hacen pensar en la existencia de vida extraterrestre, hay incluso quienes afirman que pensar que estamos solos en el mundo no es más que un pensamiento egocéntrico.
Así, la historia de Boriska no ha pasado desapercibida; apareció por primera vez en 2007 cuando este autodenominado «Niño Índigo» salió a la luz por The Star Magazine. decía haber nacido en 1996 en Volgogrado, Rusia, pero que en una vida pasada había vivido en el planeta Marte.
Este niño sabía muchísimo de astronomía, apenas teniendo solo 11 años, él decía que había conocido muchos planetas cuando era un piloto de la fuerza aérea marciana. señalaba que las ciudades en Marte tenían estructuras megalíticas y que sus habitantes medían hasta siete metros.
Como prueba, su madre asevera que Boriska levantó la cabeza dos semanas después del nacimiento, comenzó a hablar unos meses después y podía leer, dibujar y pintar a la edad de un año. La madre de Boris (o «pequeño Boriska», como lo apodaron), Nadezhda Kipriyanovich, afirma que su nacimiento en 1996 fue el más rápido que jamás haya visto.
Además, ella no sintió ningún dolor. Según, el niño comenzó a hablar cuando solo tenía cuatro meses. Y, a los dos años, empezó a leer y a sorprender a los profesores de su colegio con la gran inteligencia que poseía.
Las primeras apariciones como ‘marciano’
En un campamento con sus amigos y padres a los siete años, Boris reveló como que venía de Marte, y además aseguró tener una misión para salvar la vida en la Tierra. Dio detalles de su vida en Marte, como la tecnología avanzada usaban en aquel planeta y el hecho de que los marcianos dejan de envejecer a los 30 años, a diferencia de los humanos. Afirmó que era el oxígeno de la Tierra lo que nos hace envejecer, lo cual es una explicación científicamente correcta.
“Sin embargo, la alta tecnología del planeta ha hecho que los grupos se peleen por el poder allí, lo que condujo a Marte a una guerra destructiva”, puntualizó.
Boris dice que él y otros habitantes del mundo que también son “índigo” se han dado cuenta de que la Tierra se dirige hacia un desenlace similar al de Marte.
Agregó que la civilización marciana estaba tan avanzada que podían viajar a través de las galaxias. Además, “viven bajo tierra ya que el medio ambiente fue envenenado por la radiación en una devastadora guerra nuclea”.
Según él, la vida en la Tierra cambiará cuando “se abra la Esfinge de Guiza”, en Egipto, con la ayuda de un mecanismo secreto detrás de su oreja. Sin embargo, ni siquiera Boris conoce los detalles.
También dijo que la Tierra anteriormente tenía un solo continente, llamado Lemuria. Y estaba habitado por personas que medían hasta nueve metros.
Boris incluso pudo describir la nave que piloteó cuando vino a la Tierra en misiones científicas. Según el chico de Marte, la nave espacial tenía materiales compuestos con metal, caucho y superficies magnéticas. En lugar de simplemente impulsarse por el espacio, atravesó diferentes dimensiones, que sirvieron como atajos para llegar aquí más rápido.
Las investigaciones del caso
En 2017, 10 años después de que comenzaran las conversaciones con en el que en ese momento era un niño, los científicos descubrieron una habitación secreta en una de las pirámides. Y eso es gracias a la ayuda de los gadgets. Sin embargo, aún no han podido ingresar.
Los científicos que pudieron hablar con Boris desde el inicio, afirman que, desde siempre, su vocabulario y la capacidad de descripción son impresionantes. A pesar de que el 90% de sus historias no son verificables científicamente. Aunque hoy, 15 años después, varios datos han podido ser corroborados.
El mejor registro que se tiene de Boriska Kipriyanovich es parte del Proyecto Camelot, en ese registro Boriska explicó complicadas ecuaciones de astrofísica que en la actualidad son utilizadas.
Con la confirmación de ciertos datos que entregó, se inició una búsqueda por encontrar a Boriska, que actualmente tiene 26 años. Solo se ha podido encontrar lo que sería una fotografía reciente. Su ubicación es un misterio y solo existen rumores; vive con un bajo perfil en una ciudad rusa o el Kremlin lo tiene bajo custodia, aparentemente.
Pero, ¿dónde está ese chico de Marte?
Se dice que Boriska desapareció junto con su madre y una serie de intentos de los periodistas occidentales por localizarlo han fracasado.
Uno de sus socios rusos le dijo a un periodista que él ahora está en un pueblo remoto. El chico estaría allí bajo la protección del gobierno ruso, por lo que cualquier intento de contactarlo sería inútil.
Varios psíquicos afirmaron que pudieron comunicarse con Boriska a través de sus mentes. Según ellos, el niño confirmó que estaba en un lugar remoto con su madre, pero que está bien y que el gobierno ruso tiene algo que ver.
*Foto de portada tomada de:revistapazes.com