La aerolínea de bajo costo Wingo anunció el lanzamiento de su experiencia ‘destino oculto’ en Colombia.
Este es el primer vuelo que se conoce de este tipo, en lo que pareciera una curiosa forma de hacer publicidad y llamar la atención de los aventureros ya que las personas no sabrán dónde aterrizará el avión.
El destino elegido es lo han llamado ‘Paraíso de Cerveza Corona‘ marca que se une a Wingo para ofrecer esta experiencia que es nueva en el país latinoamericano.
Lo que hemos conocido de manera extraoficial, por fuentes cercanas a este medio de comunicación al interior de la aerolínea, es que solo serán 186 los pasajeros los que podrán vivir esta experiencia con destino oculto de tres días.
El programa tendrá un costo de $2.900.000 mil pesos colombianos por persona, valor que incluye hospedaje, traslados, alimentación, fiestas, y otras amenidades.
Saldrá desde Colombia
El avión saldrá desde el aeropuerto internacional El Dorado de Bogotá el próximo 22 de noviembre y regresará al país el 24 de noviembre.
“Experiencias como ‘vuelo con destino oculto’ demuestran la personalidad y la identidad de la marca”, expresó Simón Maya, Gerente de Mercadeo de Wingo.
Las únicas pistas que entregó la compañía es que el destino elegido es un lugar fuera de Colombia.
Asimismo, es necesario tener el pasaporte en buen estado y con al menos 6 meses de vigencia posteriores a la fecha del vuelo.
Po lo menos los colombianos no requieren tener visa para entrar a este lugar, según recalcó Wingo.
Los mejores destinos para descansar
El Caribe es probablemente el complejo turístico de playa más grande del mundo.
Y aunque muchas de las islas del Caribe no son realmente parte de América Latina, Cuba y México por sí solos tienen muchos complejos turísticos con todo incluido.
Pero si quieres saber sobre otras opciones de lugares en los que puedes descansar, desde Q’Pasa escogimos estos lugares para ti.
Ihla Grande, Brasil
Esta pequeña isla se encuentra en la costa de Brasil, al sur de Río de Janeiro, pero también bastante cerca de Sao Paulo.
Teniendo en cuenta su proximidad a las dos ciudades más grandes de Brasil, es un tanto sorprendente lo intacta que aún se encuentra.
Lo mejor de todo es que también se puede llegar a través de la ciudad portuaria colonial de Paraty.
Al entrar al puerto de Ihla Grande, te darás cuenta de que es solo un pequeño pueblo encajado en un pequeño valle.
La pintoresca iglesia del pueblo está justo al lado del puerto, en la playa, y es la estructura dominante del pueblo.
Máncora, Perú
Esta pequeña ciudad costera sigue siendo eso. Se ha vuelto popular entre la élite de Lima en los últimos años, pero aún está fuera de las rutas turísticas internacionales más habituales.
La playa no es lo mismo, pero la arena en sí probablemente sea del blanco brillante o amarillo de las playas de otros lugares.
Lo que le falta en belleza llamativa lo compensa con el ambiente. Me recuerda a una de esas playas tailandesas que solían ser tan relajadas y poco concurridas antes de que el turismo de playa se volviera completamente estratosférico en Tailandia.
Puedes comprar algo de comida y un pisco sour a un vendedor ambulante y simplemente sentarte en la playa durante horas, pasando el tiempo.
También hay algunos complejos turísticos de playa de calidad y de tamaño boutique frente al mar.
Tal vez no sea un destino en sí mismo, pero si estás buscando un lugar para relajarte después de un itinerario agitado en Perú o Ecuador, este sería mi lugar sugerido.
Cayos, Belice
Belice, uno de los dos únicos países de habla inglesa de América Latina , es una pequeña franja de tierra al sur de la Riviera Maya de México y al este de las famosas ruinas de Tikal en Guatemala.
De hecho, si buscas un poco de cultura como parte de tu viaje, puedes hacer fácilmente una excursión de un día cruzando la frontera desde Belice hasta Guatemala para visitar Tikal.
Estas pequeñas islas de arena son tan pequeñas que son esencialmente pequeños pueblos de playa que flotan en el agua.
Considerando su proximidad a los mega resorts de Cancún y Playa del Carmen en la Riviera Maya mexicana, es sorprendente que aún estén relativamente vírgenes.
La mayoría de los alojamientos son razonablemente básicos, pero sin duda hay algunas opciones superiores para aquellos que buscan algo un poco más cómodo.