Las elecciones presidenciales de Estados Unidos, que dieron como resultado la victoria de Donald Trump sobre Kamala Harris, han provocado que muchos sufran la depresión electoral.
Decepcionados por la victoria del magnate y preocupados por el estado de la democracia de este país, ahora muchos están descargando su angustia en línea, buscando países a los que puedan mudarse.
Varios medios de comunicación estadounidenses informan que una parte importante de los estadounidenses están considerando mudarse al extranjero, apenas unos días después de las elecciones presidenciales.
Entre quienes han expresado su preocupación y están considerando seriamente la posibilidad de mudarse se encuentra la estrella de Barbie y Ugly Betty, América Ferrera.
La actriz de 40 años planea viajar al Reino Unido con su esposo, Ryan Piers Williams, y su hijo Sebastian, de seis años, y su hija Lucia, de cuatro.
Se dice que otros, como Hugh Jackman y Renee Zellweger, también están considerando mudarse.
No solo los famosos quieren irse
Pero no son solo las celebridades las que están pensando en mudarse de Estados Unidos.
Un vistazo a Google Trends reveló que las búsquedas de «salir del país» y «cómo mudarse» experimentaron un aumento luego de que los medios de comunicación estadounidenses anunciaran los resultados a favor de Donald Trump.
El 6 de noviembre, las búsquedas de “cómo mudarse a Canadá” aumentaron en áreas que son predominantemente estados azules como Vermont, Maine, Oregon y Washington.
Además, la búsqueda de “¿puedo mudarme a otro país?” se incrementó en dos estados clave del “muro azul”: Wisconsin y Pensilvania, que luego se declaró a favor de Trump.
Tony Proscio, de 70 años, dijo a The Atlantic que una segunda presidencia de Trump era la razón por la que él y su marido iban a mudarse a Londres.
“Cuando son dos hombres casados, no es difícil imaginar lo mal que les puede ir”, dijo, añadiendo que estaba muy preocupado por la decisión que legalizó el matrimonio entre personas del mismo sexo, y que esta ley quizás no pueda sobrevivir a una futura Corte Suprema, si Trump hace aún más nombramientos.
Se esperan cambios radicales
Para muchos de los que están pensando en abandonar Estados Unidos, la principal causa es una segunda presidencia de Trump.
Les asustan los cambios radicales que el republicano planea introducir en el país una vez que asuma el mando de la Oficina Oval.
Muchas mujeres que están pensando en mudarse temen que una presidencia de Trump las prive de sus derechos reproductivos.
También se espera que aumenten los sentimientos antiinmigratorios y anti-LGBTQ, alimentados por la retórica de Trump, razón por la cual la gente está considerando mudarse de Estados Unidos.
Margaret, de 83 años y oriunda de Florida, dijo a The Atlantic que, si Trump ganaba, abandonaría el país lo antes posible.
“No confío en él. No creo que sepa lo que hace”, afirmó, y añadió que: “Simplemente encuentro escandalosa la conducta de este hombre, su actitud hacia las mujeres”.
David, un abogado de 65 años de Chicago que está pensando en mudarse a Portugal, destacó la falta de tolerancia en Estados Unidos. Le dijo a Fortune que: “Este país se ha vuelto intolerante. Este país siempre ha vilipendiado a las personas que no son como ellos”.
Los países a los que piensan migrar
Para muchos estadounidenses que están pensando en mudarse, Canadá es la primera opción.
Uno de cada cinco estadounidenses lo eligió como su destino preferido después de un resultado decepcionante en las elecciones presidenciales, informó NBC News.
El Reino Unido ocupa el segundo lugar en la lista, seguido por Japón.
Mientras tanto, Henley & Partners, una firma de ciudadanía global, informó que la mayoría de los estadounidenses que se mudan al extranjero buscan Canadá o destinos europeos como Grecia, Italia, Malta, Portugal y España.
Sin embargo, para los estadounidenses ultra ricos, también existe la opción de Nueva Zelanda y Australia.
Curiosamente, este posible éxodo recuerda al de 2016. Cuando Donald Trump asumió la presidencia de Estados Unidos por primera vez, varios estadounidenses, en su mayoría demócratas, habían expresado un fuerte deseo de abandonar el país.