Científicos desarrollan anticuerpo que frenaría uno de los cánceres más letales

El cáncer de páncreas es una enfermedad agresiva con pocos tratamientos disponibles.  

Afortunadamente, los investigadores están trabajando arduamente para mejorar las opciones de tratamiento y los investigadores de Japón han revelado algo prometedor. 

En un estudio publicado recientemente en Cancer Science, investigadores de la Universidad de Osaka han desarrollado un «anticuerpo anti-proteína asociada al citoesqueleto 4 (anti-CKAP4)».  

Este anticuerpo impide que otra proteína, Dickkopf 1 (DKK1), active la vía DKK1-CKAP4, una vía importante que estimula el crecimiento y la proliferación de las células cancerosas. 

Receptor celular 

El CKAP4 es un receptor celular, una estructura en la parte externa de las células que puede ser activada por una proteína específica.  

En este caso, CKAP4 es activada por DKK1 que causa el crecimiento del tumor.  

Los niveles elevados de DKK1 y CKAP4 en pacientes suelen indicar una transformación maligna y un mal pronóstico.  

Debido a esto, el equipo de investigación identificó la vía DKK1-CKAP4 como un objetivo para nuevos agentes terapéuticos. 

De acuerdo con Ryota Sada, autor principal del estudio, “empezamos con un anticuerpo recombinante de ratón, nuestro reto era desarrollar una forma humanizada de este anticuerpo”. 

Y es que según Sada este “pudiera lograr el mismo efecto que el obtenido en modelos de ratones y que se pudiera utilizar de forma segura en humanos”. 

Anticuerpos recombinantes 

Los investigadores primero confirmaron que el anticuerpo anti-CKAP4 recombinante inhibía la señalización DKK1-CKAP4 y la formación de tumores en ratones de laboratorio que habían recibido trasplantes de células tumorales humanas.  

Utilizaron el anticuerpo recombinante como base para desarrollar el anticuerpo humanizado Hv1Lt1.  

Hallaron que el Hv1Lt1 era capaz de unirse a CKAP4 incluso con mayor eficacia que el anticuerpo original. 

Además, Hv1Lt1 inhibía la formación de esferas según la investigación.

Que se vuelve una medida de la capacidad de las células madre cancerosas para multiplicarse en colonias con forma de esfera. 

Resultados prometedores 

Según Akira Kikuchi, una de las investigadoras, “después de desarrollar el anticuerpo humanizado, lo probamos en varios modelos de ratones pancreáticos».

La especialista dijo a la opinión pública que los resultados fueron «muy prometedores”. 

Asimismo, los expertos descubrieron que el Hv1Lt1 suprimía la formación de tumores en ratones.

Puntualmente, en los habían recibido trasplantes de cáncer de páncreas de origen tanto murino como humano.  

El Hv1Lt1 también ayudaba a modular las reacciones inmunitarias antitumorales. 

Los investigadores también probaron la respuesta de modelos de ratón que recibieron una combinación de Hv1Lt1 y fármacos de quimioterapia y descubrieron que el tratamiento combinado funcionaba mejor que los fármacos solos. 

Se abre el camino a nuevas esperanzas  

Otro beneficio de las combinaciones de anticuerpos y fármacos es que pueden ayudar a superar el problema de la quimiorresistencia al inhibir la vía de la proteína quinasa B (AKT), que suele activarse con los fármacos de quimioterapia.  

El uso de Hv1Lt1 de la mano con la quimioterapia podría reducir las dosis de ésta y la toxicidad resultante. 

En general, los emocionantes hallazgos de los investigadores abren la puerta a más investigaciones sobre anticuerpos humanizados, con esperanzas reales de mejorar el pronóstico de los pacientes para uno de los cánceres más mortales. 

Es común el cáncer de páncreas 

El cáncer de páncreas es uno de los más letales entre los diferentes tipos de cáncer. 

Es considerado la séptima causa más común de muerte por cáncer en ambos sexos en el mundo, y la mayoría de los casos y muertes ocurren en las regiones más desarrolladas. 

La tasa de incidencia global es de 5,5 y 4,0 casos por 100.000 habitantes, para hombres y mujeres respectivamente.  

La tasa de mortalidad mundial es de 5,1 para hombres y 3,8 muertes por 100.000 habitantes para mujeres.  

Estadística en el mundo  

Europa tiene las tasas de incidencia más altas, con 9,9 casos/100.000 habitantes para hombres y 7,2 casos/100.000 habitantes para mujeres. 

En América Latina, considerando la tasa de incidencia, se destaca Uruguay (9,2 y 6,5 casos por 100.000 habitantes) y Argentina (7,2 y 5,5 casos nuevos por 100.000 habitantes), para hombres y mujeres respectivamente. 

Además, un estudio señala que la variación de la incidencia seguirá aumentando hasta 2030, y las regiones norte y noreste presentarán, para ambos sexos, las tasas de mortalidad por cáncer más altas de Brasil.