Marc Márquez tuvo un gran comienzo de fin de semana en el GP de Tailandia, estableciendo un nuevo récord de vuelta durante los entrenamientos libres del viernes. Con un tiempo de 1:29.165, Márquez se hacía con el primer puesto, superando por poco a Jorge Martín y confirmando su determinación de acabar la temporada con nota alta. Sin embargo, a pesar de la buena salida, Márquez mantuvo una actitud realista, reconociendo que los pilotos de Ducati, incluidos Martín y Pecco Bagnaia, pronto podrían recortar distancias.
Márquez elogió el ritmo inicial de Enea Bastianini, subrayando cómo el piloto italiano suele empezar lento y luego mejora durante el fin de semana. También expresó confianza en la introducción de un motor nuevo para el sábado, lo que podría ayudarle a compensar el déficit de velocidad en las largas rectas de Buriram. A pesar del nuevo récord, Márquez destacó que el verdadero éxito depende de la constancia y la velocidad durante la carrera, más que de los tiempos por vuelta. Dijo que quería centrarse en mejorar la velocidad en secciones clave de la pista para mantener su ventaja.
Mientras tanto, Jorge Martín mostró calma y determinación, centrándose en gestionar la presión que acompaña su apuesta por un primer título mundial. Después de una temporada marcada por errores y ansiedad, Martín dijo que se siente mejor preparado que el año pasado y quiere maximizar los puntos disponibles en el fin de semana tailandés. Explicó que su principal objetivo no es batir récords, sino conseguir buenos resultados en la carrera sprint y en los grandes premios. Martín también mencionó la posibilidad de probar un nuevo motor para las últimas carreras de la temporada.
Jack Miller, con su inconfundible estilo, puso el toque de espectáculo a la jornada con una atrevida maniobra, intentando robarle el show a Martín. Tras ver a Martín realizar un stoppie, Miller respondió con su propia versión, obteniendo la aprobación del piloto español. Sin embargo, a pesar de la diversión, Miller enfrentó desafíos técnicos en la pista, admitiendo dificultades para manejar las curvas 5 a 8. El piloto australiano dijo que quiere trabajar en su estilo de conducción para superar estos obstáculos, manteniendo una actitud positiva a medida que se acerca el final de su carrera con KTM.
Pecco Bagnaia tuvo un comienzo desigual el fin de semana tailandés, teniendo problemas con la puesta a punto de la moto durante los libres. A pesar de las dificultades iniciales, Bagnaia expresó confianza en su capacidad para mejorar y afirmó que el circuito de Buriram debería adaptarse mejor a su estilo de conducción que Phillip Island. El actual campeón reiteró que su enfoque hacia el campeonato se mantiene sin cambios: trabajar para estar perfecto el día de la carrera, independientemente de la creciente presión.
El GP de Tailandia promete ser una etapa decisiva para el campeonato, con Márquez, Martín y Bagnaia dispuestos a dar batalla. Márquez, aunque mantiene el foco en su propio desempeño, sabe que su rol podría influir en la pelea por el título entre Martín y Bagnaia. Mientras los aficionados esperan ansiosamente la clasificación y las carreras del fin de semana, la pregunta sigue siendo: ¿podrá Márquez mantener su impresionante ritmo y robarse el espectáculo? ¿O surgirán Martín y Bagnaia en esta fase crucial de la temporada?