Cada vez con más frecuencia se hacen virales vídeos de personas que expresan sus sentimientos o sus pareceres sobre cuestiones diversas.
Uno de los últimos que ha saltado a la fama es el vídeo de un joven exigiendo que sus padres lo mantengan, alegando que él no pidió nacer, lo que ha generado un intenso debate sobre las expectativas de vida en la edad adulta.
“No estoy obligado a trabajar porque nací sin mi consentimiento”, dijo el joven en su video de TikTok, conocido allí como @hassanazteca.
Agregó a su argumento “Si yo no pedí nacer, ¿por qué tengo que trabajar ahora? Que me mantengan y ya está”.
Este es el último argumento viral que circula en TikTok y otras plataformas de redes sociales, y se considera una idea creciente entre las generaciones más jóvenes.
“Creo que a pesar de tener veintiún años no estoy obligado a trabajar, porque básicamente nací sin mi consentimiento. En otras palabras, mis padres me obligaron a nacer”, explicó Hassan en su TikTok, expresando su pesar por tener que trabajar y culpando directamente a sus padres por el hecho de tener que hacerlo.
Un punto de vista filosófico
Desde un punto de vista filosófico, el joven tiene un argumento: no tuvo voz ni voto en el asunto de haber nacido y, por lo tanto, no debería tener que hacer nada, ni siquiera trabajar.
Si fue, como él dice, obligado a nacer sin su consentimiento, entonces las consecuencias de dicho acontecimiento no son de su incumbencia.
“No me pidieron consentimiento y no tiene sentido que porque mis padres quisieron darme la vida hace 21 años ahora tenga que trabajar”, argumentó el joven en su video.
Sin embargo, muchos no compartieron sus opiniones bien intencionadas compartidas en su declaración y los usuarios expresaron su incredulidad en los comentarios de sus videos.
Muchos se expresaron con palabras más duras, llegando al extremo de decirle al joven lo que sentían sobre su filosofía, y uno de los comentarios más suaves fue “a su edad, con esos argumentos, la maleta y la puerta, Darwin tenía razón”.
Otros dijeron que trataban de imaginarse diciéndoles eso a sus padres a su edad, e insinuaron que @hassanazteca tenía un sentido de privilegio.
Un pensamiento más convencional
Un punto de vista más común sobre este tema es el de gratitud y respeto hacia los padres y los mayores, un punto de vista que es especialmente común en las comunidades españolas.
No es raro en muchos países ver a hijos e hijas trabajar para apoyar y financiar las vidas de sus padres y abuelos y para “devolver” lo que sus tutores les dieron.
No está determinado cuál filosofía es la correcta, sin embargo, algunos son más privilegiados que otros para poder cuestionar estos temas y desafiar las tradiciones.
Es innegable que el joven y su opinión han causado impacto en las redes sociales y han causado revuelo en quienes la han escuchado.
Los jóvenes no quieren trabajar
A medida que nuestra carrera alcanza el nivel de liderazgo, olvidamos que la etapa de la vida suele ser tan importante como la edad.
Los jóvenes en la actualidad quieren trabajar de forma productiva, quieren un trabajo valioso en el que sientan que son valorados y que a sus empleadores les importa algo más que ganar dinero.
Los Millennials y los Z nos han visto valorar demasiado el trabajo, sobrevalorarlo por encima de nuestra salud, nuestra comunidad, el planeta y, lo más importante, ellos mismos.
Esta generación, llamada también «la generación de cristal» quieren una forma de vida diferente, una forma en la que el trabajo ocupe su lugar: algo importante pero no abrumador. Valioso y valorado.
El dato histórico
El lugar de trabajo del siglo XXI requiere que veamos el trabajo de manera diferente, y seguro que conozco a muchos baby boomers y personas de la generación X que también quieren trabajar menos ahora.
A lo largo de la historia de la humanidad, siempre hemos querido que nuestros hijos tengan más que nosotros.
Desde nuestros días en las cavernas hasta después de la segunda guerra mundial, esto significaba mejor comida, mejor salud, mejores viviendas, educación y oportunidades.
Una investigación de Day Week muestra que cuando las organizaciones trabajan en su productividad para poder reducir el tiempo de trabajo, su gente pasa más tiempo con sus familias y vemos un aumento en la cantidad de tiempo que los hombres pasan cuidando a sus hijos.
Así que démosle a los jóvenes, quienes son nuestros futuros líderes, una voz sobre cómo el lugar de trabajo de su futuro impactará en ellos, en nosotros, en nuestras comunidades, en nuestros negocios y en el planeta.
- Imagen de portada tomado/Pantallazo de cuenta de TikTok @hassanazteca